Desfile del Día de la Hispanidad vedado a los españoles

El Gobierno socialista se empleó a fondo para salvar la cara de Zapatero en el Desfile del Día de la Hispanidad frente a las críticas de los ciudadanos. Una auténtica operación de ingeniería de la censura se sirvió de vallas para cortar calles, música para tapar los silbidos y eliminación de tribunas, todo para ocultar el malestar ciudadano y censurar la voz del pueblo. Un auténtico cordón sanitario contra la libertad de expresión del pueblo. Un desfile para el pueblo pero sin el pueblo.

Los miles de ciudadanos que acudieron a presenciar el desfile se encontraron con vallas que les separaban cientos de metros de un desfile que apenas podían vislumbrar. Cuando en la lejanía se sucedían los silbidos y peticiones de dimisión, la música tapaba la protesta oportunamente. Para proteger la imagen del maltrecho líder socialista se impide al pueblo español celebrar su fiesta nacional. El Gobierno se ha apropiado del Desfile y se lo ha robado a los españoles. A mí me recordó a esos desfiles que hacían (y aún hacen) en los países comunistas, donde tampoco son bien recibidas las críticas populares.