miércoles, 23 de septiembre de 2009

Dos caras de la misma moneda

El decretazo sobre inmigración y la imposición de la homogeneidad fiscal son dos caras de la misma moneda con la que Zapatero paga sus apoyos a costa del Estado.

La imposición fiscal es ejemplo del peor intervencionismo despótico y una locura consistente en perseguir y penalizar a quien baja impuestos y premiar a quien los sube. Con ello Zapatero pretende beneficiar a las Comunidades gobernadas por el PSOE y satisfacer a Cataluña, evitando comparaciones con quienes como Madrid bajamos impuestos.

La homogeneidad fiscal es un ataque directo de Zapatero a Madrid y buena prueba del temor de los socialistas a las comparaciones. La política de rebajas fiscales que practica la Comunidad de Madrid obtiene mejores resultados contra la crisis que el aumento de presión fiscal y el afán recaudatorio de Zapatero, pero eso a los socialistas les da igual, para ellos lo importante es otra cosa: comprar apoyos al precio que sea, aunque sea a costa del mismo Estado.

Respecto al decreto sobre inmigración es evidente que entra abiertamente en contradicción con la Constitución (Artículo 149. El Estado tiene competencia exclusiva sobre... Nacionalidad, inmigración, emigración, extranjería y derecho de asilo) y que es otra cesión incomprensible a Cataluña que compromete al resto del país, la segunda cesión en un día.

Y por si todo esto no era suficientemente patético, sale un diputado de CiU acusando a Esperanza Aguirre de franquista nada más y nada menos que... ¡por defender la Constitución y pedir que se cumpla! Yo he dicho que esto era una imbecilidad, pero creo que debí decir una soberana estupidez.

1 comentario:

  1. Siento decirlo, pero esto va mal, pero que muy mal. La deriva PSOE Nacionalistas a la que nos lleva la necesidad de permanencia de ZP, el q le parece muy bien llevarse a las niñas de viaje a costa del contribuyente, hace que paso a paso, impuesto a impuesto, decretazo a decretazo, la desigualdad entre españoles sea escandalosa. Soluciones, a corto difíciles, y para cuando llegue el tiempo de las elecciones, a lo peor es tarde...
    Saludos

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